Este artículo es de la época en que los auriculares y los micrófonos de cristal (Sal de Rochelle) todavía era común. Hoy todavía podemos encontrar estos componentes en algunas tiendas, pero son raros. Ellos exigían cuidados especiales, abordados en el artículo, que ya no son necesarios en los equivalentes modernos de cerámica.

    Estos componentes presentan características eléctricas tales que permiten su utilización en aplicaciones en que otros tipos de transductores como los auriculares magnéticos o dinámicos no pueden ser usados.

   En algunos de nuestros montajes requerimos el uso específico de este tipo de componente, y tendremos motivos para decir que no podrá haber su sustitución por un equivalente dinámico o magnético o de cualquier otro tipo.

   Los auriculares y micrófonos de cristal básicamente están constituidos por un cristal de Sal de Rochelle que presenta propiedades piezoeléctricas, es decir, presenta. La propiedad de convertir energía mecánica en eléctrica y viceversa.

    De este modo, cuando se presiona por una onda sonora hace aparecer en determinada región una diferencia de potencial que puede ser aplicada a un circuito y amplificada, y del mismo modo, cuando establecemos una diferencia de potencial en determinada región, el cristal sufre una deformación mecánica , pudiendo con ello generar una onda sonora equivalente.

   En el primer caso tenemos la utilización del cristal como un micrófono y en el segundo como un auricular.

   Sin embargo, como el fenómeno ocurre siempre bilateralmente, podemos decir que todo micrófono de cristal puede ser usado como auricular y viceversa si bien sus encapsuladores normalmente permiten un mayor rendimiento en una función específica.

   Con respecto a los auriculares de cristal, normalmente se pueden encontrar con la apariencia mostrada en la figura 1.

 

Figura 1
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El lector no debe confundir ese tipo de auricular con lo que eventualmente acompañe su radio portátil o grabadora, pues éstos normalmente son magnéticos. Los auriculares de cristal presentan una impedancia bastante elevada, a diferencia de los auriculares magnéticos o dinámicos cuya impedancia es muy baja.

   Podemos fácilmente comprobar si un auricular es magnético abriendo o retirando su conductor acústico de plástico.

   En los auriculares magnéticos veremos en la parte interna un pequeño disco de metal liso que es el diagrama, mientras que en los auriculares de cristal, veremos una lámina de aluminio que posee en su centro un pequeño rebote donde es atrapado el cristal. (figura 2).

 

Figura 2
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Entre las propiedades importantes que podemos destacar en un auricular o en un micrófono de cristal tenemos su elevada impedancia del orden de muchos megohms, y su sensibilidad.

   En el caso de los auriculares, se trata, por lo tanto, del tipo ideal para la construcción de receptores experimentales de pequeña sensibilidad, y del micrófono, del tipo ideal para operar con amplificadores que no presenten mucho, alto rendimiento.

   Un problema que ocurre con los auriculares y los micrófonos de cristal es su sensibilidad a la humedad. El cristal piezoeléctrico al absorber humedad pierde sus propiedades eléctricas y se debilita dejando de funcionar con el tiempo,

   Por lo tanto, estos dispositivos deben guardarse en lugares secos y no muy calientes, ya que el calor también los afecta.

Una cajita con sílice gel sería el lugar ideal para guardarlos.